El lugar correcto para viajar a Rennes y explorar los lugares locales. Habitaciones enormes con un horno de microondas, una nevera y una zona de comedor, y camas super cómodas. Una cocina cómoda y un baño bueno. Una ubicación buena en las proximidades del casco antiguo y del distrito histórico y también del centro de la ciudad y hay un parking público. Está a solo 1 km del Musée des Beaux-Arts.

Me han encantado los empleados, fueron encantadores y maravillosos!

Mis 2 noches en Rennes han sido geniales. Las habitaciones eran impecables y magníficas, con ducha. Tenía una cafetera/tetera, una nevera y una estufa. La ubicación era excelente y buena, no muy lejos de del centro, de restaurantes principales y también del teatro de la ópera y de fácil acceso. Vine a visitar el Tribunal Administrativo, situado a poca distancia del hotel.

Nos ha gustado mucho pasar el tiempo aquí, de verdad que lo aconsejamos!

Personal bueno y ubicación excelente en el corazón del distrito histórico. Más aún, estaba muy, pero que muy cerca del casco antiguo, del centro de la ciudad.

La habitación que reservé era enorme e impecable, con una ducha. La ubicación era super céntrica, en las proximidades de la ciudad antigua, de restaurantes, del centro de la ciudad. Encontré tiempo para ver el Parlamento de Bretaña, que está a un agradable paseo de la propiedad.

El hotel está en una ubicación inmejorable, en el centro histórico de la ciudad. La habitación estaba muy limpia y con una decoración antigua encantadora.El desayuno era delicioso y lo servían en la habitación.El staff era amable y dispuesto a ayudar en todo momento.

Casi perfecto.

el hotel se encontraba super cerca de cafeterías, también de restaurantes. en general, la habitación era enorme y magnífica con una ducha. ha sido un fin de semana relajante, no tenía ganas de irme.

Situación inmejorable, silencioso

Encanto de la casa en todos los detalles. Cómodo departamentito en old town.Propietario amable facilitó parking.Excelente ubicación.Desayuno perfecto.Decoración preciosa al estilo victoriano.Espacio bien aprovechado

Na.

Una habitación impecable y magnífica con camas super cómodas, y una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico. En general un lugar excelente y estupendo al lado del casco antiguo, de la catedral y del centro histórico de la ciudad👍

Cama bastante buena, habitación lo suficientemente espaciosa, baño bonito. El hotel tenía de todo, incluyendo una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico. Su ubicación era excelente, estaba muy, pero que muy cerca del centro de la ciudad, de bares y también de del aeropuerto. Situado a sólo 1 km del Centre Historique de Rennes.

La habitación muy prolija y con estilo antiguo encantador. La cama muy cómoda y el baño súper limpio.El dueño amable y servicial en todo momento.El desayuno rico y variado, servido en la habitación.

Nada.

Habitaciones con una ducha. Incluía instalaciones esenciales, como una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico.

Las habitaciones son impecables y magníficas con una ducha. La atmósfera del hotel es tranquila. El personal es encantador y maravilloso, la ubicación es buena.

Lo único malo es que no hay ascensor.

mi segunda estancia en Rennes fue aún mejor gracias a Le Quatre. La decoración victoriana y el encanto de la habitación me enamoraron al instante. La ubicación en el centro y el desayuno servido en la habitación eran simplemente perfectos. Sin duda, 100% recomendable.

Falta un baño en la habitación.

La habitación lo suficientemente espaciosa era magnífica y el baño bonito. La cama era bastante buena y había cafetera/tetera y cristalería. Ubicación: el hotel estaba al lado del teatro de la ópera, también del centro histórico de la ciudad. Además, estaba en el corazón del distrito histórico.

Estuvimos con los colegas en Le Quatre y la pasamos genial. La ubicación era inmejorable, en pleno centro histórico y cerca de todo lo que nos interesaba visitar. Además, el dueño fue súper amable y el apartamento estaba súper chulo, con todo lo que necesitábamos para tener una estancia perfecta. El desayuno que nos traían a la habitación era lo más, nos cargaba las pilas para todo el día de turismo. ¡Sin duda, volveríamos!

Si tuviera que pedir algo más, sería que el apartamento tuviera una sala común para socializar con otros jóvenes que se hospedaran en Le Quatre. Sería genial tener un lugar donde juntarnos, compartir música y disfrutar de la noche en Rennes.